Thursday, September 20, 2018

Entiendo que tengas que buscar a alguien más. No estoy molesta. Después de tanto estoy cansada de luchar contra lo inevitable. Me alegro por ti, porque será mejor que yo en muchísimas cosas, empezando porque puede escucharte en el sentido original de la palabra, porque va a estar allí cuando le necesites. Además no tendrá todos los problemas que yo invento por afición, toda esa inseguridad, ese peso. Toda la culpa de no saber hacer las cosas bien. Que probablemente no se va a estar preguntando por qué diablos no es más bonita, más segura y más divertida. Por qué le tocó nacer en un mundo donde nunca es suficiente para nada. Ahora ya no tengo que obligarme a luchar contra mis propios pensamientos y eso me libera un poco. Por mí está bien que tengas con quién salir, con quién reír, con quién cenar en casa, con quién platicar por horas tumbados en la cama. Al fin y al cabo sí estaré parcialmente feliz por ti porque te lo mereces, en un sentido muy natural de la justicia y el aprecio que te tengo. Para mí hay una parte que nunca se acaba, también eso lo acepto; te extraño, y extrañar es un sentimiento bueno para hacer compañía.